ANATEMA


“Ser en medio de la locura. Un hombre asfixiado en un hospicio simbólico se somete a un doble encierro: el que proviene de la represión exterior y el que determina su extraña personalidad. ANATEMA instala un discurso estético de gran exigencia, donde autor, director e intérprete nos imponen una propuesta de despiadada e inusitada belleza. El personaje manifiesta “no ser” como inapelable condición de su existencia. Un reflejo de esta actitud lo aproxima a “la nada” original, al extravío de su condición sexual y a una suerte de existencialismo andrógino que le permite desarrollar un humor ácido y de desopilantes características.”